Un hermanastro y su hermanastra fueron atrapados en un ardiente revolcón, con él encima de ella. Ella se tambaleó por la sorpresa de su repentino empuje, pero pronto se complació con el salvaje y rítmico baile del deseo. Su encuentro prohibido encendió una pasión ardiente, dejándolos a ambos sin aliento y deseando más.